La infancia es la etapa en la que se desarrollan las bases para el resto de la vida.

Una intervención a tiempo puede hacer la diferencia

Un examen optométrico en pediátricos cobra especial relevancia por ser el período en el que se desarrolla la visión. El desarrollo visual se realiza de manera progresiva desde que nacemos, por eso es importante controlar que los cimientos sobre los que se está formando el sistema visual sean los adecuados, evitando así problemas cuyas consecuencias negativas serán muy apreciables en el proceso de aprendizaje.

La Optometría Pediátrica tiene muchos campos de actuación para favorecer el correcto desarrollo visual y evitar problemas futuros tanto visuales como de rendimiento.

En cada etapa del crecimiento, hay pruebas específicas que el Optometrista Pediátrico maneja pudiéndose medir por ejemplo la agudeza visual o la visión estereoscópica en niños que aún no saben hablar.

“Las revisiones optométricas son fundamentales durante todo el proceso de desarrollo visual”

¿Cuándo debo hacer una revisión optométrica a mi hijo?

Deberíamos hacer la primera revisión visual completa en los primeros años de vida. Es muy aconsejable antes de los tres años, para descartar cualquier problema visual que pueda afectar al desarrollo normal de la visión. Es necesario hacer un seguimiento hasta que la visión esté perfectamente madura y sea eficaz.

El examen visual no es el mismo si el niño tiene 1 mes, 6 meses o 3 años; por eso en cada edad hay que controlar y ver su desarrollo especifico.

Antiguamente se creía que los bebés no veían. Esto no es cierto, ven en cerca, su agudeza visual no se ha desarrollado, ven borroso, además ven en blanco y negro hasta aproximadamente los tres meses, donde se empieza a desarrollar la visión en color; por eso, hay test específicos para tomar la agudeza visual en blanco y negro.

SEÑALES QUE PUEDEN INDICAR UN PROBLEMA VISUAL EN LOS MÁS PEQUEÑOS

En lactantes:

  • Leucocoria: pupila con reflejo blanco.
  • Sospecha de estrabismo.
  • Si no reacciona ante una luz parpadeando o no dirige la mirada a una luz brillante.
  • Si no sigue un objeto grande en movimiento.
  • Si no reacciona a la proximidad de la cara de los padres.

Desde 2- 3 MESES:

  • Si no tiene interés por objetos brillantes.
  • Si no sigue un objeto brillante en movimiento.
  • Si no salta visualmente de uno objeto a otro.
  • Si no le llaman la atención los juguetes a su alrededor.

A los 6 MESES:

  • Si no golpea los objetos con sus manos ni hace por cogerlos.
  • Si no recoge los objetos pequeños que se caen.
  • Si hay diferencia de respuesta cuando se le tapa un ojo u otro.

Al empezar a GATEAR o ANDAR:

  • Si se golpea o tropieza con las cosas.
  • Si se cae fácilmente.

Desde los 2 AÑOS:

  • Si se acerca demasiado a la televisión, al cuento o al papel al pintar..
  • Si entorna los ojos cuando mira algo alejado.
  • Si desvía un ojo en ciertos momentos de día.
  • Si tuerce o gira la cabeza al mirar algo.

NUNCA es demasiado pronto para realizar una exploración de la función visual.

La detección precoz es muy importante, ya que si el optometrista encuentra algún problema en el desarrollo visual, programará un plan de revisiones o estimulación visual si fuese necesario.

Hay que tener en cuenta que a partir de la etapa escolar, los problemas de visión van a influir en el rendimiento escolar del niño.

¿Si mi hijo tiene problemas en el colegio puede tener relación con la visión?

. Existe un porcentaje importante de problemas de aprendizaje en las aulas que están causados directamente por un problema visual, ya sea funcional o de procesamiento de la información. Muchos niños clasificados de torpes, perezosos o incluso disléxicos, tienen problemas en el sistema visual que le impiden la lectura cómoda y eficaz, lo que le lleva a problemas de comprensión y rendimiento. Si sospechamos de alguna alteración o existe alguna dificultad o nos llama la atención algún comportamiento es primordial descartar cualquier problema y evitar el fracaso escolar.

Es recomendable un examen optométrico en niños:

Para prevenir:

  • Antes de los 6 meses.
  • A los 3 años (antes de empezar Educación Infantil).
  • A los 6 años (antes de empezar Educación Primaria).

A cualquier edad si existe sospecha de:

  • Estrabismo
  • Mala visión
  • Se cubre un ojo
  • Dolores de cabeza
  • Inmadurez en su desarrollo